Sobre Meghan y Harry pesa una fuerte acusación. Contrario a lo que pasa con el príncipe William que está trabajando de lleno contra el cambio climático, su hermano, el príncipe Harry y Meghan Markle están acusados de ser los miembros de la realeza que más contaminan.
No es la primera vez que los duques de Sussex están bajo el lente crítico por sus costumbres nada ambientalistas.
Acusación contra Meghan y Harry
En el pasado, tanto la exactriz de Hollywood como el nieto de la reina han estado bajo escrutinio por abusar de los vuelos privados una costumbre que genera mucha contaminación.
El portal SaveOnEnergy resaltó que los duques ocupan el octavo puesto de los monarcas que menos contribuyen con el ambiente por el uso de jets privados cuyos vuelos que emiten grandes desechos tóxicos en la atmósfera.
Contrario a su padre, el príncipe Carlos ocupa las primeras plazas de los miembros de la monarquía más activos en contra de los cambios ambientales. Le sigue el duque de Edimburgo, Camila Parker y la reina Isabel II.
El puesto en la lista que ocupa el duque de Sussex contradice su labor con fundaciones que protegen el medio ambiente. Harry ayudó a crear la compañía Travalyst que promueve un turismo sustentable que reduce el impacto negativo de los viajes en la naturaleza.
Por su parte, el príncipe William anunció la semana pasada la entrega de un prestigioso galardón que busca premiar las mejores ideas contra los problemas ambientales que enfrenta el planeta.
